El Stadium of Light abría sus puertas para el primer juego de la jornada en la que los anfitriones recibían a los Saints. El encuentro finalizó con reparto de puntos después de que cada equipo controlara un tiempo. Los gatos negros llegan a 18 puntos pero siguen en descenso mientras que los Saints siguen novenos con 31 unidades.

 

Gus Poyet optó por un 4-3-3 con dos ex United, John O’Shea y Wes Brown, en el eje de la defensa y el recién llegado Marcos Alonso en el lateral izquierdo. Ki, Cattermole y Larsson ocuparon el medio con Fabio Borini y Adam Johnson en los costados. Emmanuele Giaccherini y Steven Fletcher se quedaron en el banco.

 

Mauricio Pochettino, por su parte, apostó por un 4-2-3-1 con Rickie Lambert en punta y Adam Lallana, Jay Rodríguez y Steven Davis detrás de él. Victor Wanyama y Pablo Osvaldo siguen fuera por lesión.

 

El comienzo del juego fue un monólogo del Southampton, que mantuvo el control del balón y arrinconó a su rival. El dominio no tardó en dar sus frutos, pues a los tres minutos de partido, Jay Rodríguez sacó un remate de larga distancia que entró ajustado al palo.

 

La reacción de los gatos negros luego del gol brilló por su ausencia. A la media hora de juego, los Saints acumulaban más del 70% de posesión y en un tiro de esquina, Dejan Lovren se evadió de su marca, Wes Brown, y con una tijereta en el aire puso el 0-2. Los aficionados del Sunderland comenzaron a perder los nervios ante la pasividad de los suyos.

 

Sin embargo, cuando peor pintaban las cosas para los locales, solo dos minutos después del gol, un pase largo de Adam Johnson le llegó a Borini, que mató el balón con el pecho en el área, se dio media vuelta y recortó distancias.

 

Los hinchas recuperaron la fe en su equipo y la transmitieron a sus jugadores. No obstante, los de Pochettino recuperaron el control en la recta final y con el 1-2 ambos equipos enfilaron el camino de los camerinos.

 

Al segundo tiempo, el Sunderland saltó al césped con otra actitud y a punto estuvieron incluso de darle la vuelta al marcador. A los 70 minutos, una jugada que comenzó en la izquierda acabó al otro lado, donde estaba Adam Johnson, que sacó un zapatazo ante el que algo más pudo hacer Artur Boruc.

 

Y las cosas todavía empeorarían para los de Pochettino. Una entrada fuerte de Wes Brown sobre Gastón Ramírez provocó que el uruguayo tuviera que ser retirado del juego en camilla y se desatara la preocupación sobre sus aspiraciones de ir al mundial a causa de los gestos de dolor del jugador. Al mismo tiempo, en otra camilla sacaban con oxígeno a Dejan Lovren entre los aplausos de apoyo de todo el estadio tras hacerse daño al realizar una entrada. Ambos tuvieron que ser sustituidos por Pochettino sobre el final del juego.

 

El encuentro finalizó en empate y ambos equipos dejaron la sensación que si hubieran apurado un poco más se hubieran podido llevar la victoria. Al Sunderland se le viene entre semana la vuelta de la semifinal de la Copa de la Liga contra el Manchester United tras obtener ventaja de 2-1 en la ida. En liga, el Sunderland regresará al Stadium of Light para recibir al Stoke, mientras que los Saints jugarán ante el Arsenal en su estadio después de su partido de FA Cup ante el Yeovil Town.