Ser entrenador de fútbol implica mucho más que elegir once jugadores para un partido. Supone mantener a toda una plantilla motivada o lidiar con los egos dentro del vestuario, algo nada fácil en el caso del Manchester City, y eso que los resultados acompañan.
Clara muestra de ello es la situación de tres jugadores «citizens»: Kolo Touré, Adam Johnson y Carlos Tévez. Johnson se negó a subir al autobús tras el partido contra los Wolves de la semana pasada de la Carling Cup; Carlos Tévez sigue sancionado y sin entrenar con el resto del equipo; y Kolo Touré, que ha perdido su puesto en el once titular, podría ser sancionado por dar positivo el pasado mes de febrero.
Roberto Mancini, técnico del City, no quiere que estos problemas afecten al rendimiento del equipo, por lo que ya ha empezado a solventar alguno. Tras el partido de Munich, dijo que Carlos Tévez estaba «acabado en el Manchester City», después de que el delantero argentino se negara, supuestamente, a saltar al terreno de juego.
Pues bien, parece que Mancini ha cambiado de opinión y está dispuesto a dar una segunda oportunidad al argentino. En unas declaraciones publicadas por el medio italiano Corriere della Sera, el entrenador «citizen» ha dicho: «Todo depende de Carlos. Si se disculpa con el equipo y conmigo, todo será como antes. Yo sería el primero en perdonarle. Si no es así, Tévez tiene un valor que todo el mundo conoce y algo ocurrirá en enero».
