El portero belga del Sunderland Simon Mignolet acabó siendo el héroe del partido frente al Everton gracias a una excelente actuación que culminó en el tiempo de descuento con dos grandes intervenciones. Mignolet lleva unas semanas a un gran nivel salvando al Sunderland en los momentos clave. Esta tarde siguió por el mismo camino y gracias a él, los de Martin O’Neill arrancaron el empate en Goodison que lleva la eliminatoria al replay.

 

La estadística no podía ser más desalentadora para los “black cats” antes del encuentro. El Sunderland no había vencido en Goodison Park en ninguna competición desde hacía once años. Pese a ello, los hombres de O’Neill saltaron al campo a dominar el esférico y antes del cuarto de hora ya mandaban en el marcador. Tras una falta lateral, el zaguero escocés Phil Bardsley recogió el rechazo y desde unos 25 metros conectó un gran disparo que batió a Tim Howard, adelantando a los suyos en el electrónico.

 

La alegría no duró mucho para los visitantes, pues solo 12 minutos más tarde, el Everton, campeón cinco veces del torneo y que este año ha puesto especial ilusión en esta competición, empataba el encuentro.

 

El protagonista fue Tim Cahill. El delantero australiano no pasa ni mucho menos por su mejor momento y esta temporada le está costando ver puerta con asiduidad, pero esta tarde logró su segundo tanto de la temporada, gracias al cual los «toffees» empataron la eliminatoria. Un centro de Baines fue desviado con la cabeza por Jelavic y llegó a Cahill para que el australiano batiera a Mignolet cogiéndole a contrapié.

 

La segunda parte no deparó muchas ocasiones hasta los minutos finales, cuando Goodison Park apretó y el Everton se creció en busca del partido. Pero se topó con el meta belga del Sunderland, que rindió homenaje al apodo de los suyos y fue más que nunca un “black cat”.

 

Primero intervino tras dos disparos de Tim Cahill atajados con habilidad y en el último suspiro del partido llegó su mejor intervención de la tarde.

 

John Heitinga conectó un gran cabezazo ante el que respondió Mignolet con un genial vuelo hasta la escuadra para evitar el tanto. Pero el peligro no terminó aquí, ya que Jelavic fue el primero en llegar al rechazo y conectar a bocajarro un potente disparo. Mignolet echó mano de sus recursos felinos, se levantó rápidamente del suelo tras el cabezazo de Heitinga y volvió a salvar de nuevo el furioso chut de Jelavic.

 

El partido concluyó con empate gracias al portero visitante, que logró sellar el replay del partido en el Stadium of Light el próximo 27 de marzo. Se antoja de nuevo un encuentro vibrante. Pero probablemente el respetable de Goodison Park abandonó el estadio pensando que habían perdido una valiosa oportunidad de “cazar” a los “black cats” y meterse en las semifinales de esta FA Cup que tanta ilusión le hace a los “toffees”