Ilie Oleart

Nani extiende los disturbios hasta Wembley

Mientras en el londinense barrio de Tottenham se vivía una noche de tensión y violencia, la mecha que arrancó los disturbios en Wembley la prendió Nani. El portugués lideró la remontada del United culminando la obra de arte que supuso el 2-2 y marcando el gol de la victoria en el tiempo añadido.

 
El Manchester United tiene algo que no se puede comprar con dinero. Los de Sir Alex Ferguson entraron en su vestuario en Wembley en el descanso con un 2-0 en contra tras recibir dos goles fortuitos de la nueva potencia del fútbol.
 
Sin embargo, cuanto más cambian las cosas, más fiel se mantiene el United a sí mismo. El orden del viejo mundo no parece dispuesto a cambiar. Así que, mientras algunos periodistas comenzaban a escribir sobre el ascenso del Manchester City en el firmamente inglés, el United hizo lo que mejor sabe. Pusieron una marcha más y se pusieron a la altura de las circunstancias. Dos goles en cinco minutos de Chris Smalling y Nani pusieron tablas en el marcador y dejaron a sus rivales en estado de schock. En una de las temporadas más abiertas y disputadas que se recuerdan, el United parece tener claro el rol protagonista que se espera de él.
 
El momento cumbre del partido fue el gol del empate a dos. Fue un tanto digno del Barcelona, el único equipo al que Ferguson y los suyos temen. Fue un gol de velocidad y potencia, de talento e imaginación.
 
Y también de juventud. Wayne Rooney y Tom Cleverley intercambiaron pases. El segundo conectó con Ashley Young, que ha costado 15 millones de libras este verano, que devolvió a Rooney. Tacón para Cleverley, que toca para Nani, que finaliza superando a Hart. Todo en diez metros frente al área del City. Fue la máxima expresión del tiki-taka.
 
Era el 2-2 después de que el joven Chris Smalling rematara un golpe franco de Young tras el descanso.
 
El sentimiento de injusticia impulsó al United. No deberían haber estado por detrás en el marcador, tras disfrutar de la mayor parte de la posesión en la primera parte. Pero el City se avanzó por medio de Joleon Lescott, que cabeceó una falta sacada por David Silva a los 38 minutos en la que fue prácticamente su primera ocasión del partido. Luego el United le dio kilómetros de espacio y horas de tiempo para que Edin Dzeko pusiera el segundo con un disparo lejano en el que David De Gea podría haber hecho más.
 
En esas circunstancias es cuando el United muestra su mejor versión. Aunque existe cierto consuelo para el City. Incluso cuando el final era inevitable, no se hundieron y estuvieron a la altura del United toda la tarde. Ese posiblemente sea su destino esta temporada: luchar hasta el final para acabar sucumbiendo por esa pizca de calidad de la que carecen. Desde luego, lo que no les falta es corazón, valentía o determinación, como demuestra la retahíla de amonestaciones de recibieron. Desde luego, no fue un partido amistoso sino un derbi intenso.
 
Las ocasiones fueron más del United que del City. Lescott tuvo que intervenir dos veces para conjurar el peligro. Luego llegaría su remate de cabeza tras una falta innecesaria de Patrice Evra sobre James Milner, y el gol de Dzeko. Ferguson intervenino en el descanso. Rio Ferdinand, Nemanja Vidic y Michael Carrick se quedaron en el vestuario y entraron Cleverley, Phil Jones y Jonny Evans. Funcionó.
 
Una vez logrado el empate, el resultado era inevitable. El City luchaba contra su destino. No podían aguantar siempre. Un balón largo provocó una indecisión del hasta entonces impecable Kompany, y Nani le robó la cartera y encaró solo a Joe Hart. Le regateó y puso el 2-3 definitivo para la algarabía de la zona de los seguidores del United. Es solo la primera batalla de la temporada, pero se antoja muy significativa.
 
Manchester City: Hart, Richards, Kompany, Lescott, Kolarov (Clichy, 73), De Jong, Silva, Y Toure, Milner (Johnson, 67), Balotelli (Barry, 59), Dzeko. No utilizados: Taylor, Wright-Phillips, Savic, Agüero.
 
Manchester United: De Gea, Smalling, Ferdinand (Jones, 46), Vidic (Evans, 46), Evra (Rafael, 71), Nani, Carrick (Cleverley, 46), Anderson, Young, Rooney, Welbeck (Berbatov, 89). No utilizados: Lindegaard, Park.
 
Goles: 1-0: Lescott (38), 2-0: Dzeko (46), 2-1: Smalling (52), 2-2: Nani (58), 2-3: Nani (94)
 

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Ilie Oleart