Álvaro Escalante

Nolan impone su ley (2-0)

El West Ham venció en Boleyn Ground ante el Swansea City gracias a una inexpugnable defensa y a la inspiración de Andy Carroll y, sobre todo, de Kevin Nolan. Los Hammers completan una semana de ensueño mientras el Swansea sigue en problemas.

 

Premier League

West Ham 2
Swansea 0
Ficha técnica
2 – West Ham: Adrián; Demel, Collins, Tomkins, McCartney; Noble, Taylor, Downing, Nolan (Nocerino, 87), Jarvis (Carlton Cole, 66); Carroll.
0 – Swansea: Tremmel; Tiendalli, Chico, Williams, Davies; Amat (Pozuelo, 63), de Guzman, Routledge, Shelvey (Hernández, 70), Dyer; Bony.
Goles: 1-0, m.26: Nolan. 2-0, m.45+1: Nolan.
Esta semana, el West Ham se ha empeñado en desafiar a la lógica y al orden establecido. Tras empatar en Stamford Bridge disfrazado de Chelsea, este sábado el West Ham venció con dos goles de Kevin Nolan tras sendas asistencias de Andy Carroll. En todo caso, todo esto le importará poco a Sam Allardyce, que ve como su equipo reacciona y aunque sigue en descenso, el futuro se antoja mucho más esperanzador que tras el 5-0 ante el Nottingham Forest y el 6-0 ante el Manchester City. Por su parte, el Swansea sigue en tierra de nadie, pero con los puestos de descenso cada vez más cerca.
 
En unos primeros veinticinco minutos de auténtico aburrimiento, solo el West Ham intentó algo de provecho. Pero ni Andy Carroll ni James Tomkins con sus respectivas intentonas consiguieron poner en serios apuros a Gerhard Tremmel.
 
Fue en el minuto 26 cuando los de Sam Allardyce se adelantaron gracias a un gran servicio desde tres cuartos de Stewart Downing para Carroll, que bajó el balón para que Kevin Nolan marcara de volea desde dentro del área.
 
El Swansea quedó aturdido y poco después del gol pudo poner tierra de por medio el West Ham. Sin embargo, el centro de Matt Jarvis desde línea de fondo tras una gran apertura de Nolan se paseó por el área de los cisnes sin encontrar rematador. Tras eso, los de Michael Laudrup intentaron hacerse con el ritmo del encuentro, a lo que respondieron los Hammers aculándose en su área. Y pese a recular, un fallo defensivo dejó a Wilfred Bony solo ante Adrián. Tuvo que ser Tomkins el que se lanzara a la desesperada para deshacer el entuerto. Solo un minuto después, una recuperación de Jonjo Shelvey en la medular propició una contra que él mismo iba a finalizar de forma defectuosa.
 
Pese a las dos intentonas galesas, el West Ham seguía bien plantado y creando peligro gracias a un inconmensurable Carroll. Justo antes del descanso, el propio Carroll iba a prolongar un saque de esquina de Downing para que lo cazara Nolan como un killer de primera categoría. El 2-0 dio carpetazo a la primera mitad.
 
En el inicio de la segunda parte, el West Ham no bajó el ritmo y muy pronto pudo cerrar el marcador, cuando un fallo defensivo del Swansea propició que Carroll dejara libre de marca a Jarvis, que se escoró demasiado al regatear a Tremmel. Pese a todo, pudo articular un disparo que mandó a córner Ben Davies. Minutos después, era Carroll el que probaba suerte desde la media distancia sin puntería.
 
Poco a poco el partido fue cambiando y muy cerca estuvo de recortar distancias el Swansea, cuando un rechazo que cayó a los pies de Nathan Dyer en el balcón del área provocó el chut del menudo jugador cisne. Tomkins desvió con tan mala fortuna que el balón cogió el efecto equivocado y por poco acaba en el fondo de las mallas.
 
El Swansea se había apoderado de la pelota y, para más inri, el cuadro local se quedó con uno menos por la expulsión de Carroll. En una pugna del delantero con Chico Flores, el exjugador de las urracas soltó el codo a la cara del español. Aunque no impactó de lleno, la intención fue suficiente para Howard Webb.
 
Con uno menos, el Swansea sacó la artillería, pero vivir en el campo contrario no le granjeó la oportunidad de perforar la meta de Adrián. Solo un disparo de Bony desde dentro del área en el minuto 80 puso en apuros a una defensa de primera categoría. Con la impotencia visitante por no poder derrumbar el muro de hormigón planteado por los capitalinos finalizó el partido. El fútbol decimonónico volvió a surtir efecto.
 

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Álvaro Escalante