No se irá contento a casa Mark Hughes en el día de hoy. Pese a no hacer un partido brillante, su equipo llegó a estar 2-0 y con el West Ham en la lona, pero perdonaron lo imperdonable y el equipo londinense se rehízo para empatar la contienda. Queda el Stoke a cuatro puntos del descenso en el ecuador de la tabla, mientras que los de Sam Allardyce bajan al quinto puesto, pero no caerán de posiciones europeas pase lo que pase en el derby de Manchester.

 

Con más mordiente salieron los locales ante un inoperante West Ham, pero las ocasiones brillaban por su ausencia en los primeros minutos, ya que salvo una llegada desde tres cuartos que acababa en las nubes de Stoke-on-Trent de Victor Moses en el minuto siete o una internada por la derecha de Bojan Krkic que no encontró el remate de Mame Biram Diouf dentro del área pequeña en el veintiuno, el resto del tiempo fue totalmente intrascendente.

 

Solo una ocasión reseñable iba a tener unos Hammers totalmente desconocidos, y se produjo en el minuto veintisiete cuando una gran combinación en campo ajeno acababa con un desastroso remate de Stewart Downing. Salvando esto, la pelota seguía siendo para los Potters, que tres minutos después pudieron adelantarse gracias a un cabezazo de Jonathan Walters en el primer palo tras un saque de esquina que se marchó arriba.

 

Cuando sí lo hicieron fue en el treinta y tres, ya que Moses iba a ser mas listo que la defensa visitante y aprovecharía la indecisión de los zagueros para anotar el primero con algo de fortuna tras un servicio desde la derecha.

 

Ni el gol espoleó a un West Ham sin ideas que pudo irse con mas castigo a la reanudación de no ser porque Bojan no encontró puerta tras una buena jugada personal desde la izquierda o por la mala puntería de Diouf tras zafarse de Collins. En el mano a mano, el delantero estrelló su remate contra Adrián San Miguel.

 

El inicio de la segunda mitad fue un naufragio del West Ham, ya que en el minuto cincuenta y seis ya perdía por 2-0 cuando Diouf aprovechaba un centro de Walters después de que este le robara la cartera a Aaron Cresswell. Pero antes pudo marcar Bojan de falta lejana, y un minuto después del gol era Moses el que la tuvo tras ganar en carrera a Carl Jenkinson.

 

Pero el West Ham pasó del desastre a elevar las pulsaciones de inmediato, y Enner Valencia anotaba de cabeza en el segundo palo tras un maravilloso servicio tras cabalgada de Downing. El gol le dio algo más de posesión a los de Allardyce, pero las ocasiones siguieron cayendo para el Stoke como la que dispuso Steven N’Zonzi o el incomprensible fallo de Diouf, que mandó fuera un remate de cabeza a bocajarro.

 

Muy caro pudo pagar el Stoke la falta de pegada, porque en el seteinta y tres empataba un inspirado Downing con un gran zapatazo desde dentro del área. Tres minutos después Valencia desde muy lejos conectó un chut potentísimo que se marchó besando el poste.

 

Pero el West Ham volvió a acularse contento con el punto, y en los últimos diez minutos llevó la iniciativa de nuevo el equipo del Britannia Stadium, que se encontró con un muro defensivo a punto de ser derribado por Geoff Cameron a falta de siete para el final, pero su definición fue horrible y Adrián la mandó a córner. Poco reseñable ocurrió hasta el pitido final de Chris Foy.