Ilie Oleart

Premier League 2013-14: las decepciones del año

Algunos clubes se mueven en el mercado de fichajes como pez en el agua y son capaces de hallar gangas, aquellos jugadores disponibles por un precio inferior a su valor real. En esta ocasión nos toca escoger lo contrario, aquellos jugadores que costaron fortunas y han tenido un rendimiento mediocre. O pésimo, más bien. Y esta temporada, ha resultado especialmente duro.

 
1. Norwich: QPR versión 2013-14
Tras ascender a los Canaries, Paul Lambert guió al club a una 12ª posición. La temporada pasada, ya con Chris Hughton, el equipo alcanzó la 11ª posición. Tras invertir casi 30 millones de libras este verano en jugadores contrastados en Europa como Ricky van Wolfswinkel, Martin Olsson, Nathan Redmond, Leroy Fer, Gary Hooper o Johan Elmander, muchos esperaban que el Norwich se convirtiera en una de las revelaciones del torneo. Y ha acabado lográndolo aunque no por los motivos adecuados. Con el descenso a Championship y una nómina disparada, se avecinan tiempos difíciles para los Canaries.
 
2. Marouane Fellaini
El belga no faltará este año en ningún recopilatorio de lo peor de la temporada. Fue el único fichaje estival del nuevo Manchester United de David Moyes por casi 30 millones de libras. La gestión de su fichaje no contribuyó a facilitarle la vida. Unas semanas antes, el United podría haber activado una cláusula del contrato del belga que le habría permitido ahorrarse cinco millones. Ya sobre el césped, Moyes no logró encontrarle la ubicación adecuada. No rindió en el doble pivote junto a Carrick y apenas tuvo oportunidades en la media punta, monopolizada por Wayne Rooney. Su futuro en el United es del mismo color que su tupido cabello.
 
3. Los atacantes de los Spurs
Resulta difícil señalar a un único culpable de la tragicómica temporada de los Spurs. Daniel Levy vendió a Gareth Bale por una fortuna y le encargó a André Villas-Boas le reconstrucción del equipo. Meses después, el portugués fue sustituido por Tim Sherwood, que se ha convertido en objeto de burla generalizada por su afición al Arsenal, acérrimo rival, sus incongruentes alineaciones y sus extrañas manías. Pero entre todo este desaguisado, destacan dos nombres por encima de los demás: Roberto Soldado y Erik Lamela. Llegaron a cambio de más de 50 millones de libras con la intención de hacer olvidar a Bale. Sobra decir que no lo lograron. Soldado solo ha demostrado que sabe tirar penaltis. Lamela marcó un gol al Sheriff en la Europa League.
 
4. Dani Osvaldo
El fichaje de Osvaldo fue la demostración de la ambición del Southampton. Los Saints pagaron más de 15 millones de euros a la Roma por un jugador que llegó para sentar a Rickie Lambert en el banquillo o, a lo sumo, compartir ataque con el inglés. Las cosas no resultaron a pesar de la aparición estelar de Osvaldo con su look a lo Jack Sparrow. Tras unos meses en la costa sur y tres goles, el delantero italoargentino decidió que deseaba cambiar de aires. Ante la negativa del club, consideró que atizar a su compañero José Fonte en un entrenamiento sería un buen camino para lograrlo. Tras multarle, el club decidió que posiblemente lo mejor era la marcha del delantero así que el 31 de enero lo cedió a la Juventus. El club italiano tiene hasta el 31 de mayo para ficharle por 19 millones de euros. Pochettino estaría posiblemente a deshacerse de él por la mitad.
 
5. Kostas Mitroglou
El Fulham decidió invertir más de 13 millones de libras en un fichaje estrella que le salvara del descenso e hiciera olvidar a Dimitar Berbatov, que se marchó a Mónaco a disfrutar del sol, los casinos y las lecturas de los poetas malditos franceses en la costa azul. Mitroglou llegó en enero, jugó un partido en febrero y otros dos en marzo. A partir de ahí le perdimos la pista. Si alguien tiene alguna información sobre su paradero, hay un señor estadounidensepakistaní en Craven Cottage que lo agradecería.
 
Mención especial para técnicos: Paolo Di Canio y David Moyes
En una temporada con diez destituciones, no resulta fácil elegir a los peores técnicos. Nos quedaremos con dos. Tras salvar al Sunderland la temporada pasada manchándose las rodillas del traje en el proceso, Paolo Di Canio fichó a catorce jugadores en verano y vendió a algunos de sus mejores integrantes, como Simon Mignolet o Stéphane Sessègnon. Tras cinco partidos de liga y un solo punto, fue despedido. Eso sí, el club se ahorró una fortuna en hielo, mayonesa y demás aditamentos.
 
David Moyes rompió todos los récord negativos en el Manchester United. Su fracaso en el mercado de fichajes no contribuyó a mejorar su situación, como tampoco la ruinosa plantilla que heredó y fue incapaz de reconstruir. 
 

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