1. Gylfi Sigurdsson (de Tottenham a Swansea por 8,9 millones de libras)
«Segundas partes nunca fueron buenas», reza el refrán. El islandés Gylfi Sigurdsson debe dejar escapar una mueca burlona cuando lo escucha. Tras completar su formación en el Reading inglés, Gylfi se marchó al Hoffenheim para tratar de hacerse un hueco en la élite europea. Su primera etapa en Swansea se produjo en 2012 cuando fue cedido por el club alemán a los galeses, entonces unos novatos en la Premier League. Cinco meses le bastaron para convertirse en una sensación en todo el país y que el Tottenham le birlara el fichaje al Swansea. Sin embargo, las cosas no funcionaron para Gylfi en Londres y cuando en verano surgió la oportunidad de regresar a Gales, no lo dudó ni un instante. Siete goles, diez asistencias y un octavo lugar en liga después, podemos afirmar sin temor a equivocarnos que acertó de pleno.
2. Cheikhou Kouyaté (de Anderlecht a West Ham por 6,6 millones de libras)
Sam Allardyce disfruta fichando medio centros defensivos africanos como Andy Carroll en una cata de cervezas. De vez en cuando, claro, acierta. Es el caso de Cheikhou Kouyaté. Este senegalés de 25 años aterrizó en Londres tras haberse labrado un nombre en el Anderlecht belga como un recambio de Alex Song y acabó provocando que Allardyce retocara todo su sistema para hacerle un hueco en el once. Cuando los defensas centrales comenzaron a caer como moscas, Kouyaté ocupó esa posición con solvencia propia de un jugador especializado en esas labores. A su incasable trabajo de recuperación, ha sumado cuatro goles y dos asistencias. Alex Song no seguirá la próxima temporada en Upton Park pero los aficionados no parecen muy preocupados. Ahí está Kouyaté.
3. Alexis Sánchez (de FC Barcelona a Arsenal por 37,4 millones de libras)
Pocos discutirán que el chileno ha sido el mejor jugador del Arsenal esta temporada. Durante buena parte del curso cargó con todo el equipo a sus espaldas y se erigió rápidamente en el nuevo ídolo de los Gooners. Sus 16 goles y 8 asistencias en su temporada de debut en la Premier League le convierten en uno de los fichajes que ha ofrecido un rendimiento más inmediato de la historia. Ni siquiera los múltiples rumores sobre su vida sentimental lograron descentrarle. Ha ocupado todas las posiciones del frente de ataque pero predominantemente la banda, lo cual confiere todavía más mérito a sus cifras. Posiblemente, el fichaje más rentable de Wenger desde Santi Cazorla.
4. Cesc Fàbregas (de FC Barcelona a Chelsea por 29 millones de libras)
Cuando el Barça puso a Cesc Fàbregas en el mercado, José Mourinho no titubeó. Sabía que era la pieza que necesitaba junto a Nemanja Matic. Por suerte para el técnico portugués, Arsène Wenger declinó el fichaje del catalán y el camino se allanó. Mourinho convenció a Fàbregas de que con él en sus filas, el Chelsea sería el máximo favorito para conquistar la liga. El tiempo le dio la razón. Un éxito al que Fàbregas contribuyó decisivamente, en especial en la primera parte de temporada, en que formó un dúo letal con Diego Costa. Fàbregas no podrá alcanzar el récord de asistencias de Thierry Henry en una misma temporada pero tres goles y 18 asistencias son unas cifras nada desdeñables para su primera temporada de vuelta en Inglaterra.
5. Sadio Mané (de Red Bull Salzburgo a Southampton por 13,2 millones de libras)
La irrupción de Graziano Pellè con su piel bronceada y su sonrisa cautivadora relegó a un segundo plano el fichaje de Sadio Mané, un senegalés de 22 años que venía de la modesta liga austriaca. Los meses han acabado poniendo a cada uno en su lugar. A pesar de haberse perdido varios partidos por su participación en la Copa de África, Mané ha logrado 10 goles y 3 asistencias desde su posición de extremo mientras que Pellè ha sumado 12 goles y 2 asistencias.