El verano pasado, las quinielas situaban al Norwich entre los candidatos a pelear por el ascenso en Championship, tras mantener gran parte del equipo de Premier y fichando a jugadores como Lewis Grabban o Cameron Jerome. Sin embargo, el conjunto de Norfolk comenzó la liga con una derrota ante los Wolves por 1-0. Los Canaries se adaptaron pronto al ritmo de competición de Championship y encadenaron una racha de ocho partidos sin perder, que rompió el Charlton en el último encuentro del mes de septiembre. Siete puntos en nueve encuentros fue el bagaje del Norwich en los meses de octubre y noviembre, lo que comenzó a generar dudas sobre el equipo y sobre su entrenador, Neil Adams. Ni las dos contundentes victorias por 6-1 y 5-0 ante Milwall y Huddersfield fueron suficientes para acallar las críticas y tras la eliminación en la FA Cup a manos del Preston, Neil Adams presentó su dimisión.
Corrían los primeros días del año 2015 y el Norwich tardó poco en presentar a su sustituto, Alex Neil. Las tornas cambiaron con la llegada del escocés y el Norwich conseguió entrar en el play-off de ascenso como tercer clasificado, teniendo a sus rivales regionales del Ipswich como rivales. En una gran eliminatoria, consiguieron un 1-1 en la ida disputada en Portman Road, para cerrar la eliminatoria con un contundente 3-1 en Carrow Road. En la final se midieron al Middlesbrough, que partía como favorito. Pero el Norwich sentenció con la final con dos goles en menos de quince minutos y de este modo selló su vuelta a la Premier League.
Alex Neil, el culpable del cambio
La llegada de Alex Neil al banquillo del Norwich en enero fue recibida con recelo. Su fichaje no generó demasiada expectación al tratarse de un entrenador joven -apenas superaba los 33 años- y con escasa experiencia en los banquillos. El principal logro de su currículum era un ascenso a la Premiership escocesa como jugador-entrenador del Hamilton Academical. Pero Neil logró ganarse la confianza de la grada de Carrow Road y cambió completamente a los Canaries desde su llegada, mostrando a un conjunto que funcionaba como un reloj e intentaba elaborar ocasiones con un juego más dinámico. Cuando Neil tomó el mando del Norwich, el equipo se encontraba en séptima posición a tres puntos de los puestos de play-off. Con quince victorias en 22 encuentros, certificó el pase al play-off y posteriormente el ascenso a la primera categoría del fútbol inglés.
Poco movimiento en el mercado
Cuatro entradas y tres salidas ha anunciado el club de Norfolk hasta el momento. Cameron McGeehan y Mark Bunn han salido con destino al Luton Town y el Aston Villa, mientras que el catalán Ignasi Miquel, tras no disfrutar de muchas oportunidades, se desvinculó del club, recalando en la Ponferradina de la segunda división española. Alex Neil puso sus miras inicialmente en el West Brom para el capítulo de entradas. Graham Dorrans y Youssouf Mulumbu se han incorporado a las filas de los Canaries. Posteriormente, el Norwich se hizo con los servicios del defensa del Liverpool André Wisdom, en calidad de cedido, así como Robbie Brady, que recala en Carrow Road procedente del Hull City. Se espera que el Norwich apure los últimos días del mercado estival en busca de refuerzos, principalmente en la parcela defensiva, para afrontar con garantías la temporada. No existe otra meta en mente que no sea garantizar un puesto en la Premier League 2016-2017. Conocedores de lo duro del salto de Championship a Premier League, el Norwich no quiere ser otro de esos ‘equipos ascensor’ que vive entre ambas categorías.
Los nombres propios

El irlandés Wes Hoolahan es otro de los pilares de este Norwich. El veterano jugador aporta creatividad en ataque, generando peligro con y sin balón, sumando once asistencias en la temporada pasada. En el último tramo de la temporada acusó unos problemas de rodilla que parecen superados.
Cameron Jerome fue el máximo goleador del Norwich la pasada temporada con 21 goles. El delantero inglés es un jugador móvil y oportunista, que será la referencia ofensiva del ataque de los Canaries.
Lewis Grabban ha sido otro de los jugadores importantes, ofensivamente, del Norwich la pasada temporada con doce goles. El jamaicano se perdió las semifinales del play-off ante el Ipswich tras ser sancionados tres encuentros en el penúltimo partido de liga ante el Rotherham. Grabban es un jugador ligeramente irregular, pero Alex Neil ha demostrado que sabe domar el carácter del jamaicano.
Gary Hooper (12 goles, al igual que Grabban) y el inteligente Jonny Howson completan el armamento pesado de los Canaries en la zona ofensiva, al que se sumará Robbie Brady. Las llegadas de Mulumbu y Dorrans contribuirán a apuntalar la zona medular. La debilidad del conjunto de Neil radica en la defensa. La línea defensiva titular del año pasado, formada por Steven Whittaker en la derecha, Martin Olsson en la izquierda, y Sebastien Bassong y Russell Martin en el centro, no ofrece suficientes garantías para afrontar una temporada en la Premier League. Si los Canaries desean permanecer una segunda temporada consecutiva en la élite, Neil deberá comenzar a buscar refuerzos para esa zona urgentemente.