Después de todo un verano mareando la perdiz con Clint Dempsey, ahora resulta que el Fulham está casi mejor sin él. En su debut en la Premier League, el Fulham despedazó al Norwich y el recién llegado Mladen Petric marcó dos goles y generó otro.

 

El Fulham ha perdido a sus tres delanteros en seis meses. Primero fue Bobby Zamora en enero, que se marchó al QPR. Este verano, Andy Johnson siguió su mismo camino y Pavel Pogrebnyak optó por el Reading. Con Clint Dempsey (23 goles la temporada pasada) fuera del equipo, muchos predijeron que a este equipo le costaría marcar goles. Nada más lejos de la realidad.

 

Los Cottagers estuvieron brillantes y sembraron muchas dudas sobre el futuro de los Canaries de Chris Hughton en la Premier League. Mladen Petric, fichado gratis tras quedar libre con el Hamburgo este verano, fue el mejor del partido con sus dos goles.

 

El espectáculo dio inicio con el gol del incombustible Damien Duff antes de la media hora de juego. El lateral izquierdo Risse (otro incombustible) lanzó un balón largo en diagonal que controló de maravilla Duff y batió al guardameta Ruddy con el exterior del pie.

 

A partir de ahí comenzó el solo de Petric, que marcó de cabeza justo antes de la pausa y repitió justo después, aunque con algo de fortuna, ya que su disparo rebotó en un defensa y se coló en la portería de Ruddy ajustado al palo.

 

La joven promesa Alex Kacaniklic, sustituto de Dempsey en el día de hoy, se estrenó con la camiseta del Fulham para convertir el 4-0 con una brillante definición tras una asistencia del omnipresente Petric. Ya en los minutos de la basura, el sustituto Steve Sidwell transformó un penalti provocado por Hugo Rodallega, que también salió de cambio en la segunda parte.

 

El Norwich fue una sombra del equipo que, bajo las órdenes de Paul Lambert, concluyó la temporada pasada en 12º lugar. De hecho, si no hubiera sido por John Ruddy, los Canaries podrían haber abandonado Craven Cottage con una goleada a sus espaldas.

 

Andrew Surman fue el único jugador visitante que probó fortuna ante la portería rival en la primera parte. Ya en la segunda, Hughton dio entrada a Steve Morison por el propio Surman y cambió a un 4-4-2, pero no logró cambiar la suerte del partido.

 

Los aficionados de Craven Cottage se animaron a cantar «Are you watching Clint Dempsey?» («¿Estás mirando, Clint Dempsey?») en las postrimerías del encuentro. Una muestra de que dan por perdido a su mejor jugador de la temporada pasada y, lo que es más importante, que no les importa.