Finalmente se ha conocido el alcance del litigio legal entre el Manchester City y Carlos Tévez, después de darse a conocer que el club le declaró culpable de mala conducta por declararse en huelga y ha dejado de pagarle 9,3 millones de libras en concepto de multas, salarios perdidos y primas desde el comienzo de la temporada.
El club dejó de pagar el salario de Tévez a finales de noviembre y le multó con seis semanas de sueldo, lo que asciende a 1,2 millones, durante una audiencia disciplinaria celebrada el 21 de diciembre. Tévez apeló inmediatamente, a pesar de que voló a Buenos Aires el 7 de noviembre dejando claro que no tenía intención de volver. Sin embargo, una audiencia posterior celebrada el 11 de enero ratificó la decisión.
El club espera que Tévez apele por segunda vez, esta vez frente a la Premier League, tras fijar el lunes como plazo máximo para recurrir. El club le ha retenido 6 millones de libras en concepto de primas de fidelidad, y le multó con dos semanas de salario por negarse a cumplir las órdenes de Roberto Mancini durante el partido de Champions League contra el Bayern de Múnich en septiembre.
Tévez ha dejado de cobrar 1,7 millones de salario desde que el club dejó de pagarle a finales de noviembre y se ha convertido en el jugador que ha recibido una sanción económica más alta en la historia del fútbol.
Mientras, su futuro profesional se complica cada día que pasa. La directiva del City tiene la impresión de que el Milán, Galliani, Tévez y sus agentes han actuado a espaldas del club para abaratar el coste del traspaso. Por eso, no están dispuestos a rebajar ni una libra el precio del traspaso y el club parece dispuesto a dejarle sin jugar lo que resta de temporada a menos que reciba una oferta que alcance la valoración del club.
