Gran imagen la que dejó el Stevenage en su partido frente al Tottenham de Harry Redknapp en el encuentro correspondiente a la quinta roda de la FA Cup. Los locales se mostraron consistentes frente a unos Spurs que presentaron un once mixto, compuesto por algunos jugadores menos habituales, pero también por titulares como Bale o Parker.

 

Cierto es que el Tottenham tampoco sufrió excesivos apuros y en ningún momento pareció que tuviese que salir por la puerta de atrás de la FA Cup. Pero aún así, el Stevenage mandó el partido al «replay» y podrá gozar de su noche de gloria en White Hart Lane, que presumiblemente suena más a premio moral para el equipo de la League One que a posibilidades reales de clasificación.

 

La primera parte fue entretenida pero careció de ocasiones claras de gol. El Tottenham pensó que el partido se resolvería solo, seguramente por la debilidad del rival, mientras que el Stevenage dejó que pasaran los minutos y que el valioso 0-0 se mantuviera en el marcador.

 

Las mejores ocasiones del partido fueron para el recién llegado en el mercado invernal Louis Saha, que fue titular en punta junto con Defoe. Un disparo lejano y un cabezazo desviado en un saque de esquina fueron el escaso bagaje ofensivo de los visitantes. Los locales, ni tan solo se aproximaron con peligro a la portería de Cudicini.

 

La complacencia en el fútbol es peligrosa y, pese a que la eliminatoria no peligró en ningún momento, la sorpresa está siempre a la vuelta de la esquina y un resbalón del central, un disparo lejano que rebote en un zaguero o un error puntual del portero te pueden dejar fuera de la competición de buenas a primeras.

 

Seguramente en el «replay», con los jugadores del Stevenage cegados por la visita a White Hart Lane, los Spurs pasarán la eliminatoria sin demasiados apuros. Pero racionalizar esfuerzos a estas alturas de la temporada es vital. Y el Tottenham deberá volver a jugar otro encuentro frente a un conjunto de la League One que no hubiese sido necesario si los hombres de Redknapp hubiesen puesto un poco de ganas e intensidad en el encuentro de esta tarde. Seguro que a Harry la broma no le hace ninguna gracia.