Robin van Persie no se sentará a negociar un nuevo contrato con el Arsenal antes de que concluya la temporada, aunque el club fuerce la situación, según sus representantes. Esta postura podría provocar que otros clubes presenten ofertas en enero, ante la debilidad del Arsenal en esta situación, ya que a Van Persie solo le quedarán 18 meses de contrato.
El Arsenal es consciente de que al delantero, que ha marcado 13 goles en 19 partidos esta temporada, solo le quedará un año de contrato este verano. Su técnico, Arsène Wenger, no desea que se repita la misma situación que con Samir Nasri, que tuvo que ser vendido en agosto al Manchester City porque su contrato expiraba en 12 meses y se negaba a renovar con el club.
Nasri fue vendido por 24 millones de libras y Van Persie ha confesado a sus amigos que solo considerará su situación al final de temporada, generando temores a que podría marcharse por una cantidad similar.
Cesc Fábregas, que también abandonó el Arsenal este verano con destino a Barcelona, advirtió a su antiguo club esta semana: «A su edad, esta es su última oportunidad de moverse. Si se queda, se retirará en el Arsenal. Es un modelo de conducta, la estrella del equipo y no pueden permitirse perderle. Veremos qué decide pero ha sido muy fiel al Arsenal durante muchos años. Es un jugador clave y los aficionados le adoran».
Manchester City, Inter de Milán, Chelsea y Manchester United están interesados en el jugador, mientras Real Madrid y Barcelona siguen de cerca la situación.
Van Persie es el jugador que más gana en el Arsenal tras la marcha de Fábregas. El español ganaba 90.000 libras semanales y el delantero probablemente gane unas 70.000 libras semanales, por lo que se ha quejado de la rígida estructura salarial del club.
Después de que Mathieu Flamini se marchara en el verano de 2008 al Milán, Van Persie dijo: «Deberían asegurarse de que estos jugadores se quedan. El Arsenal tiene una política que impide superar una determinada barrera de dinero. Creo que deberían aumentar los salarios. Si quieres mantener un grupo unido, tienes que hacerles felices. Con 27 o 28 años, entiendo que tomes la decisión de ir a otra parte si te ofrecen tres o cuatro veces más». Más claro, agua.
