FA Cup
Hull City | 5 |
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Sheffield United | 3 |
Ficha técnica |
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5 – Hull City: AHarper, Rosenior, Figueroa (Aluko, 45), Huddlestone, Chester, Davies, Elmohamady, Meyler, Sagbo (Quinn, 64), Livermore, Boyd (Fryatt, 45). |
3 – Sheffield United: Howard, Brayford, Harris (Hill, 94), Coady, Maguire, Collins, Flynn, Doyle, Baxter (Davies, 83), Scougall (Porter, 83), Murphy. |
Goles: 0-1, m.19: Baxter. 1-1, m.42: Sagbo. 1-2, m.44: Scougall. 2-2, m.49: Fryatt. 3-2, m.54: Huddlestone. 4-2, m.67: Quinn. 4-3, m.90+1: Murphy. 5-3, m.90+3: Meyler. |
Tigers y Blades se daban cita en Wembley para disputar una semifinal de Copa que ya de por sí era histórica para los dos, pero que además lo ha terminado siendo en el apartado goleador siendo esta la cuarta semifinal de FA Cup con más goles de la historia. Los chicos de Steve Bruce sufrieron muchísimo ante el Sheffield United de Nigel Clough, que ejecutó un planteamiento excepcional, pero que finalmente no fue suficiente para derrotar a un Hull que jugará el próximo 17 de mayo, ante el Arsenal, la primera final de FA Cup de su historia.
El partido comenzó con el Hull llevando la iniciativa del juego, disponiendo de la posesión, puesto que el United no tenía como prioridad mantener el esférico. Aunque, eso sí, los Blades ejercían una presión asfixiante sobre los jugadores rivales para en cualquier error en la entrega hacerse con el balón y salir como cohetes hacia el ataque.
Tácticamente, el partido del Sheffield estaba siendo perfecto, parecido al del Wigan en la otra semifinal. El Hull, por su parte, trataba de salir de su propio campo, pero le resultaba realmente complicado. Tom Huddlestone no era capaz desde su posición de medio centro de hacer que el equipo progresase sobre el césped, mientras que los Blades esperaban pacientemente a que se les presentase la ocasión de robar el balón y salir al contraataque. Y en el minuto 19, el fantástico lateral derecho, John Brayford, sacó de banda para Ryan Flynn, que se la devolvió inmediatamente a Brayford, que ejecutó un buen centro para que Jose Baxter cabeceara para poner el 0-1 a favor del Sheffield United.
Tras el gol, el partido continuó básicamente en la misma línea de juego. Los Tigers ofensivamente dispusieron de alguna oportunidad vía Elmohamady por la banda derecha, pero eran incapaces de crear peligro. Ante la presión ejercida por los centrocampistas del United, durante un tramo del primer tiempo, Huddlestone se dedicó a enviar balones largos a Yannick Sagbo, para que éste buscase algún disparo. Como era previsible, casi todos los pases largos eran interceptados sin problemas por el portero del Sheffield United, Mark Howard.
En el minuto 41, al fin el Hull logró aprovechar un error del United. Jake Livermore recogió el balón en tres cuartos de campo para acto seguido realizar una conducción que terminó en una asistencia para Sagbo, que disparó a portería y anotó el empate a uno. Pero cuando parecía que los de Steve Bruce se iban a ir a la intermisión con el empate en el luminoso, Jamie Murphy se pegó un carrerón por la banda izquierda llegando hasta línea de fondo para centrar el balón a la frontal del área pequeña donde su compatriota, el escocés Stefan Scougall, remató a puerta con una gran testarazo que volvía a dar la ventaja al Sheffield antes del descanso.
La charla y los ajustes de Steve Bruce en el descanso, que retiró a unos flojos George Boyd y Maynor Figueroa para introducir a dos atacantes como Sone Aluko y Matty Fryatt, surgieron efecto de inmediato. A los dos minutos del segundo periodo, Huddlestone realizó un saque de esquina que primero remató Curtis Davies, el balón le cayó a Sagbo, que cedió a Livermore, que a su vez dio una buena asistencia a Fryatt, que no falló frente a Howard, logrando así colocar de nuevo el empate en el marcador.
En el minuto 52, Fryatt volvió a mandar el esférico al fondo de la red, pero para su desdicha el tanto fue anulado por fuera de juego. Aunque esa jugada invalidada quedaría tan solo como una anécdota, ya que dos minutos más tarde, David Meyler y Huddlestone protagonizaron una de las jugadas del partido al efectuar una triangulación para que el ex de los Spurs culminara una arrancada en la que consiguió dejar atrás a Collins y a Doyle para marcar el tercer gol de la tarde para los Tigers.
El arrollador comienzo de segunda parte del Hull City fue un duro golpe para los Blades, que quedaron completamente desencajados tras los dos goles recibidos. Los Tigers continuaron buscando otro gol que les diese algo más de tranquilidad y, en el minuto 66, un ex del Sheffield United, Stephen Quinn, a pase de Livermore una vez más, marcó el 4-2, que prácticamente sentenciaba a su antiguo equipo, aunque él en un bonito gesto no quiso celebrar el gol.
Pero todavía quedaba un último giro en Wembley. Cerca de cumplirse el 90 de juego, un Sheffield United exhausto seguía intentando marcar y Jamie Murphy, uno de los mejores del partido, lo logró tras una jugada algo embarullada en el área del Hull que pudo solventar anotando el 4-3 que daba esperanzas a su equipo de cosechar el empate que les llevaría a la prórroga.
Ya en el tiempo de descuento, con el Sheffield volcado buscando el tanto de la igualada, el Hull armó un contragolpe por mediación del egipcio Elmohamady, que condujo el balón y acabó asistiendo a Meyler, que marcó el gol del 5-3 definitivo que desató la alegría de la fanáticada Tiger y que permitía suspirar aliviado a su entrenador, Steve Bruce que, poco después, antes finalizar el partido, fue a animar y a felicitar por su trabajo al entrenador rival, Nigel Clough. Ya solo queda un escollo en el camino del Hull hacia el primer título de su historia. Pero será el más difícil.