El dúo de Manchester, United y City, con paso perfecto tras las tres primeras jornadas, fueron los protagonistas de un día de humillación sobre los dos clubes más importantes del norte de Londres. El resultado global fue de 13-3. El dominio del fútbol inglés ha basculado hacia el norte de las islas.
El City presentó su candidatura al título con un 1-5 ante el Tottenham Hotspur. El delantero bosnio Edin Dzeko, muy criticado la temporada pasada por su pobre rendimiento, marcó cuatro goles para el club más rico del planeta. El United respondió a sus rivales locales como suelen hacerlo: devolviéndoles a la sombra con una aplastante victoria por 8-2 ante un lacustre Arsenal. La peor derrota de los «gunners» desde 1896, cuando el Loughborough Town les infligió un 8-0, y la victoria más abultada del United desde un 8-1 ante el Nottingham Forest en 1999, y la mayor en Old Trafford desde el 9-0 al Ipswich Town 9-0 en 1995. Motivo más que suficiente para cuestionarse la continuidad de Wenger en el club tras 15 años.
«No, porque creo que se ha producido en unas circunstancias especiales» replicó el alsaciano, señalando que ocho jugadores del primer equipo estuvieron ausentes por lesión o sanción. Además, argumentó que solo se llevan tres partidos esta temporada, en la que el club selló su clasificación para la Champions League.
«Es una derrota muy dolorosa pero no la compararé para decir si es la más dolorosa. Lo es y punto. Hemos jugado tres partidos de liga y dos de Champions. Las decisiones se toman a final de temporada. Por supuesto, duele, fue humillante, pero no nos hemos recuperado físicamente del partido del miércoles ante Udinese, teníamos ocho jugadores fuera, ellos están en forma y nos han castigado».
Por tercer partido consecutivo, el Arsenal acabó con diez jugadores por la expulsión del lateral derecho Carl Jenkinson. Sir Alex Ferguson mostró cierta empatía con su colega: «Hemos marcado goles fantásticos. Podríamos haber marcado más pero no quieres hacerlo ante un equipo tan debilitado como este».
Wayne Rooney marcó su sexto hat‑trick con el United, alcanzando los 152 goles con el club, más que Paul Scholes y Ruud van Nistelrooy. «Siempre se me ha dado bien el Arsenal», dijo. «Mi primer gol con el Everton fue contra ellos, como mi primer gol en la Premier League con el Manchester United y ahora he superado los 150 contra ellos otra vez».
Wenger dijo que «no fue un partido de 8-2» e insistió en que él no es el único culpable de los problemas del Arsenal en el mercado. «Tenemos dinero si encontramos jugadores que puedan reforzar el equipo pero no soy el único del club que trabaja en eso. Tenemos 20 personas dedicadas, pero hoy faltaban demasiados jugadores. Es difícil encontrar excusas a un partido así, pero estamos por detrás de los demás clubes en términos de salarios».
El técnico del Arsenal confirmó que están cerca de fichar al delantero del Mónaco Park Chu-Young y negó su interés en Mikel Arteta. Y siguió intentando defender al equipo: «Estuvimos fatal en defensa y nos hundimos más física que mentalmente».
Samir Nasri tuvo un debut espectacular con el City y cree que los clubes de Manchester han fijado el nivel. «Estuve bien pero lo más importante es que ganamos 1-5 y enviamos una señal a los demás», dijo.