A día de hoy, todo el mundo coincide en que la lucha por el título en la Premier League está apasionante. Muchos están entusiasmados con el inicio de Arsenal y creen que ganarán la Premier, otros creen ciegamente en José Mourinho y ven al Chelsea campeón, otros creen que el Manchester City ha carburado y se dirige imparable hacia el título, e incluso hay gente (aparentemente en pleno uso de sus facultades) que mantiene que el gen ganador que tiene el Manchester United les permitirá remontar y ganar la liga. Pero lo que nadie plantea pero uno se pregunta es: ¿No tiene opciones al título el líder provisional de la liga, ese que tiene en sus filas al máximo goleador de la categoría y posiblemente mejor jugador de la liga? Evidentemente hablamos del Livepool. Y es inevitable pensar que la respuesta debe ser afirmativa.
Pocos sitúan al Liverpool entre los candidatos a ganar la liga
Desde el regreso de Suárez, mejor jugador de la liga, ha sumado el 76% de puntos
Esta osada pregunta no está hecha al azar y la más aún osada respuesta tiene un porqué. Para afirmar que el Liverpool es un firme candidato a la Premier lo primero que hay que tener en cuenta es la progresión que ha experimentado el equipo en estas 17 jornadas. Brendan Rodgers, en su primera fase de la temporada, comenzó con un esquema 4-2-3-1 con Gerrard y Leiva en el doble pivote, Henderson por la derecha, Aspas de segundo punta, Moses o Coutinho por la banda izquierda, y Daniel Sturridge en punta. Con la vuelta de Luis Suárez tras su sanción, Rodgers puso en marcha la segunda fase y decidió apostar por una defensa con tres centrales, que eran Kolo Toure, Martin Skrtel y Mamadou Sakho, dos carrileros, y una delantera con la temible pareja formada por Sturridge y Suárez. Con la lesión del primero y la dolorosa derrota en el Emirates, Rodgers inició la tercera fase y volvió a defensa de cuatro con Luis Suárez solo en punta. Atendiendo a las estadísticas, la tendencia en estas tres fases ha sido ascendente:
– Primera fase (desde la jornada 1 a la 5): sin Suárez y con la defensa de cuatro, el Liverpool tuvo un 49% de posesión, disparando 12 veces por partido, 5 de ellas a puerta. El rival, por su parte, disparó 14 veces por partido, 6 a puerta. Pese a que los rivales le ganaban por poco la partida estadística, el Liverpool logró 10 puntos sobre 15 posibles (66,66%).
– Segunda fase (desde la jornada 6 a la 10): con defensa de cinco, y Sturridge y Suárez en punta, el Liverpool acaparó el 56% de posesión, disparando 16 veces por partido, 6 a puerta, mientras que el rival disparó 15 veces por partido, yendo 4 de esos tiros a puerta. Así pues, el Liverpool pasó a dominar a sus rivales, pero volvió a conseguir 10 puntos sobre 15 posibles (de nuevo, 66,66%).
– Tercera fase (desde la jornada 11 a la 17): con defensa de cuatro de nuevo y Suárez solo en punta, obtuvo el 60% de posesión, chutando 22 veces por partido, 6 a puerta. Mientras, el rival disparó 10 veces por partido, 4 a puerta. En esta fase, el Liverpool obtuvo 16 puntos de 21 posibles (76,19%), y se ha mostrado muy superior a sus rivales, exceptuando el Everton.
Con esto se demuestra que el Liverpool está exhibiendo una gran regularidad a la hora de sumar puntos, además de la constante mejoría en su juego. En su contra juega que no dispone de una plantilla larga y equilibrada. Si se produjera una plaga de lesiones, podría apear al Liverpool de la lucha por el título. Además, es una plantilla que no está familiarizada con la presión asociada a un equipo puntero. Pero todos estos problemas, debe pensar el bueno de Brendan, son menos problemas, si en tu plantilla tienes a jugadores como Luis Suárez, Steven Gerrard o Jordan Henderson. Sí, Henderson, y me detengo en este punto. El inglés ha sido duramente criticado durante su periplo en Liverpool pero Brendan desde el primer día que llegó a Liverpool le dio su confianza y el mediocampista se la está devolviendo con creces. Henderson ha sido el único jugador de campo titular en las 17 jornadas de liga, marcando un gol y ofreciendo tres asistencias. Su rol ha sido clave en la fase defensiva del equipo.
Luego esta Luis Suárez. Desde que regresó en la jornada 6 ha marcado 19 goles y repartido 5 asistencias, por lo que participa en un gol del Liverpool cada 47 minutos. Lleva, por ejemplo, cuatro goles más que todo el Tottenham en liga. Tener a un hombre así ya debe bastar como argumento para luchar por la Premier League, pero el uruguayo no está solo. A él hay que sumarle otro delantero de garantías como Daniel Sturridge, la quinta defensa menos goleada del campeonato y la presencia de un líder y capitán de enorme determinación como Steven Gerrard. Pero hay otros factores de peso como el calendario: el Liverpool no participa en competiciones europeas y el resto de sus rivales directos en la lucha por el título sí lo hacen.
Ningún aficionado del Liverpool niega que el objetivo del club es regresar a la Champions la temporada que viene, una competición que no disputa desde la temporada 2009-10, demasiado para un club con cinco Copas de Europa en sus vitrinas. Quizás la gran mayoría de sus aficionados firmaría a día de hoy una cuarta posición pero, casi en el ecuador de la temporada, ¿se le puede negar al líder provisional de la Premier League, que cuenta con el mejor jugador de la competición, sus opciones de ganar el título? Uno, amigos míos, cree que no.