Tal y como ya ocurriera en Titanic, los visitantes acabaron hundidos pese a que a priori todo pintaba favorable. El Arsenal venía de ganar al Swansea en el Emirates sufriendo más de lo esperado (1-0) y de empatar ante el Borussia de Dortmund en Alemania (1-1), además de que se enfrentaba al colista de la liga, un equipo que tan solo había anotado tres tristes goles en las primeras cuatro jornadas. Por ello, ni los más pesimistas podrían haber previsto un partido como vivido en Ewood Park. 

 

Ambos equipos salieron con todo su arsenal. Steve Kean alineó de inicio a los dos jugadores más prometedores del equipo, el español Rubén Rochina y el argentino Mauro Formica, y sus dos últimos fichajes, Yakubu y Scott Dann. Por su parte, en los «gunners» también jugaron de inicio varios recién llegados en los últimos días de mercado, en concreto Mertesacker, André Santos y Mikel Arteta.

 

El encuentro no pudo empezar mejor para los visitantes, que se adelantaron a los diez minutos gracias a un excelente pase entre líneas de Song que Gervinho definió a la perfección cruzando el balón al palo largo. Y, por si fuera poco con el 0-1 en el marcador, Míchel Salgado se lesionó a los 20 minutos minutos y tuvo que ser reemplazado por Petrovic, un muchacho que no es lateral derecho y que por su altura (1’93) debía sufrir en el mano a mano con Arshavin, hoy titular en el extremo izquierdo.

 

Por ello, todo parecía indicar que el Arsenal iba a bajar el ritmo del partido y tratar de dominarlo a base de mantener la posesión del balón. Nada más lejos de la realidad. De entrada, concedió una clarísima oportunidad tras una falta golpeada por Rochina a Chris Samba, pero el defensa internacional congoleño fue incapaz de aprovecharla. El que sí aprovechó la primera que tuvo fue Yakubu. El delantero nigeriano, que debutaba hoy con el Blackburn, definió con clase un gran pase de Hoilett a los 25 minutos de juego.

 

Lejos de venirse abajo, los «gunners» volvieron a ponerse por delante tras una gran jugada personal de Aaron Ramsey, que la puso atrás para que Mikel Arteta estrenara su cuenta goleadora como futbolista del Arsenal a diez minutos para el descanso.

 

Con 1-2 al descanso, el Arsenal tuvo otra oportunidad de controlar el partido y dormirlo, pero, de nuevo, nada más lejos de la realidad.

 

A los cinco minutos de la segunda parte, el Blackburn empató el encuentro de una manera que refleja perfectamente al Arsenal actual. Una falta lateral al borde del área sacada por Rochina al centro del área no fue despejado de cabeza por ningún jugador del Arsenal y golpeó en la rodilla de Song, que introdujo el balón en su portería sin haberse movido, con una falta de intensidad evidente. La ofensiva del Blackburn no acabó ahí, pues diez minutos más tarde, después de que Steve Kean sustituyera a Rochina por Olsson en un ataque de locura, Yakubu golpeó de nuevo. Un córner favorable a los locales no es despejado por los «gunners», Nzonzi controla dentro del área, dispara a portería y Yakubu, el más listo de la clase, solo tiene que poner el pie para desviar el balón y que Szczesny no pueda evitar el 3-2.

 

A partir de ahí el Arsenal se volvió loco, dejando amplios espacios en la defensa  y dando entrada al velocista Walcott en detrimento de un desaparecido Arshavin. En una de éstas, un contraataque del Blackburn llevado por Olsson, acaba en gol después de que el propio Olsson ponga un centro al centro del área, rebote en Koscielny y acabe en el fondo de la red. 

 

El Arsenal apretó en los 20 minutos restantes, pero solo logró reducir distancias gracias a un buen remate de cabeza de Chamakh.

 

Por parte del Blackburn, esta victoria puede ser el punto de inflexión de la temporada. Pocos daban hasta ahora una mísera libra por ellos, pero hoy, además de haberse colocado en la zona media de la tabla, pueden haber logrado la confianza necesaria para afrontar el resto de la temporada. Por si fuera poco, Yakubu, su última incorporación, no pudo tener mejor debut, pues anotó dos goles muy importantes.

 

Por contra, el Arsenal se marcha del norteño Blackburn con la sensación de que nada podía haber salido peor, pues además de la derrota Sagna, su mejor defensa, tuvo que ser sustituido por lesión. Este Arsenal no aspira a nada más que a transitar sin pena ni gloria por la Premier League y no tiene pinta de que vaya a mejorar. Para más inri, el Blackburn, que hoy ha marcado más goles que en las cuatro primeras jornadas juntas, ya tiene los mismos puntos que los «gunners».